¿La apuesta por lograr un estado propio del actual Gobierno catalán puede afectar a la prevención del VIH/SIDA? Puede parecer extraño unir conceptos que no tienen nada a ver como soberanismo y lucha contra el sida. De hecho, lograr un estado propio catalán, como formar parte del Estado español, no es incompatible con una política de prevención del VIH/SIDA eficiente y con resultados. Pero en los últimos dos días hemos asistido a una dura polémica planteada en estos, al menos poco habituales, términos entre dos plataformas: la Confederación Española de Asociaciones LGTB (COLEGAS) y el Comité 1er de Desembre Catalunya.

Todo empezó cuando COLEGAS emitió un comunicado en el que afirmaba que las políticas de prevención del VIH/SIDA habían fracasado en Catalunya entre el colectivo de hombres que tienen sexo con hombres (HSH). La plataforma se basaba en las estadísticas que señalan que, de los nuevos casos de contagio del VIH/SIDA, en el Estado español el 54% son del colectivo HSH, mientras que en Catalunya es el 61%, siete puntos más de diferencia. Datos que nadie rebato, pero que tienen diferentes interpretaciones. Así COLEGAS pide “un giro radical en las políticas de lucha contra el VIH/SIDA en el sector homosexual” y atribuye el mayor peso en Catalunya del colectivo HSH en los nuevos contagios al “fracaso de los planes de prevención”. A todo esto, Rafael Moral, secretario general de COLEGAS, añade que “el Gobierno de Artur Mas debe parar más atención a la sanidad y menos a sus arrebatos soberanistas”. Y son estas las declaraciones más polémicas. Se llega a citar a Catalunya como ejemplo “arquetípico” del fracaso de las “políticas de prevención del VIH/SIDA tradicionales aplicadas por diferentes instituciones públicas y ONG durante los últimos años”.

La respuesta de las entidades catalanas

La interpretación de los datos por parte de las ONG catalanas y de lucha contra el VIH/SIDA remarcan, en cambio, los buenos resultados de la prevención entre el col·lectiu HSH. Acusan a COLEGAS de manipulación “de datos” y de tener “intereses políticos más allá de la prevención” y aseguran que “no hacen ningún favor al tercer sector y todavía menos a la prevención del VIH/SIDA”. Los datos, por lo tanto, no son contestados sino interpretados de forma diferente: “Si la prevalencia en Catalunya es mayor es precisamente por el éxito de las políticas de prevención y detección que se realizan conjuntamente entre las entidades que trabajan en torno al VIH/SIDA y la administración catalana”, se afirma al comunicado hecho público por el Comité 1er de Desembre y la Coordinadora LGTB de Catalunya. Las dos plataformas afirman que COLEGAS utiliza la prevención del VIH “como estrategia contra el derecho a decidir del pueblo catalán” con una actitud que consideran tendenciosa y que “ralla también en la ilegalidad, y merece tener respuesta por parte del Plan Nacional del Sida”.

En este sentido, Montse Pineda, presidenta del Comité 1er Desembre, resalta que “en este momento histórico, la defensa de la prevención del VIH en el colectivo HSH nunca ha de utilizarse como argumento partidista”. Y añade que “con la prevención del VIH no se juega, y si se hace, es inmoral y debería ser penalizado”. Por otro lado, Joaquim Roqueta, secretario General de la Coordinadora LGTB de Catalunya, critica que el Ministerio de Sanidad ha dejado de subvencionar programas de prevención de entidades “pese a su demostrada eficacia”.

COLEGAS es una confederación sin presencia en Catalunya, que nació en Andalucía hace 24 años, dónde tiene su mayor implantación, aun cuando tiene delegaciones en 7 comunidades autónomas más. Por otro lado, la otra plataforma de ámbito estatal, la Federación Estatal LGTB, que tiene presencia en todo el Estado, no se ha significado en esta polémica, al menos por el momento. La Coordinadora LGTB, nacida el 1986, es una plataforma de ámbito catalán que acoge a 8 organizaciones más, mientras que el Comité 1er de Desembre reúne a todas las entidades catalanas que trabajan en la prevención del VIH/SIDA.